martes, 25 de septiembre de 2012

Paraíso




Quien abre los ojos en el Paraíso,
mira a través de las huertas, las glorietas, las arboledas,
las caricias cálidas de sol, 
una gotita de rocío transitando ligero un pétalo de rosas,
el aroma dulce del aire cargado de vida.

Pero no todos pueden recibir ese laurél; 
para algunos la suerte decide y adjudica demasiado premio,
el resto permanece anónimo, dormido toda la vida.

Mientras llegan ecos de Artemisa desde occidente,
Penélope, teje y teje un infinito sudario,
que estire la ausencia de su amado hasta el fin de los tiempos.

La desesperanza no llena cualquier mente; 
unos pocos son héroes en la Tierra; 
algunos son grandes aquí y en el Cielo; 
pero sólo uno triunfa en el Edén.

"Hasta ahora es feliz mi corazón:
oigo este canto, veo una flor
quiero fundar toda mi gloria."

Demian.