He estado sentado aquí,
y por el sonido
trató de dirigir la mirada
en imágenes,
pero lo que veo
es su hermoso rostro
esa sonrisa irónica
de mi desaliento y fracaso.
Sin olvido,
sin pereza,
sin saberme aún extinguido.
Sólo aventuro
rodar mi misión
de encontrar un sendero
de regreso a sus caricias.
Demian.